"¿Quién dijo que los límites existen?"

Peter Czanyo comenzó a fumar a los 18 años y continuó haciéndolo ininterrumpidamente hasta sus 47. Nunca imaginó que aquello que había comenzado como una travesura de adolescente terminaría comprometiendo su salud, a tal punto de poner en serio riesgo su vida.

Además de su adicción al cigarrillo, Peter llevó siempre una vida sedentaria, alejada del deporte y de la alimentación sana. Su vida cambió radicalmente cuando le detectaron un cáncer que ya le había producido severos daños pulmonares y continuaba creciendo. Debió someterse a una operación de urgencia en la que le extirparon el pulmón izquierdo casi por completo.

Con la aparición de la enfermedad, Peter tomó conciencia de la importancia de cuidar su salud. Fue así como dejó el cigarrillo (había fumado hasta el día de su operación) y comenzó a adquirir hábitos más saludables: modificó su alimentación, aprendió a meditar y empezó a correr. De a poco se fue acercando al deporte, a la naturaleza y a las montañas. Consciente de que debía marcarse una meta que lo ayudara a afianzar el cambio radical que estaba transitando, se propuso llegar a la cima del Aconcagua.

Peter había perdido casi la mitad de su capacidad pulmonar pero no su esperanza. En el año 2009 realizó el ansiado ascenso a la montaña más alta de América llegando a los 6000 metros; aunque en esa oportunidad no pudo hacer cumbre el proceso ya estaba dando sus frutos. A sus 61 años y contra todos los pronósticos corrió cuatro veces el Cruce de los Andes (100 kilómetros en tres días), finalizó la carrera en el desierto de Atacama y completó las maratones de Berlín (2015) y Chicago (2016).

Peter Czanyo es actualmente el presidente de la Fundación Pacientes de Cáncer de Pulmón y un activista en la lucha contra el tabaquismo.